AFP


El primer envío de ayuda médica estadounidense llegó el viernes a India, que se enfrenta a un aumento exponencial de casos de covid-19, mientras se esperan más suministros de numerosos países en los próximos días.

Un avión de transporte militar Super Galaxy con más de 400 botellas de oxígeno, otros equipos médicos y casi un millón de test rápidos de coronavirus aterrizó en el aeropuerto internacional de Nueva Delhi, la capital india, que lucha contra una crisis sanitaria sin precedentes.

El viernes India informó de un nuevo récord mundial de 385.000 nuevas infecciones en las últimas 24 horas y de casi 3.500 muertes.

Varios países pusieron en marcha una importante operación de ayuda internacional y prometieron asistencia.

La entrega de Estados Unidos, que llegó desde la base militar de Travis en California, se produce tras las conversaciones mantenidas esta semana entre el presidente estadounidense Joe Biden y el primer ministro indio Narendra Modi.

"Estados Unidos está entregando un cargamento por valor de más de 100 millones de dólares para proporcionar ayuda urgente en los próximos días a nuestros socios en India", dijo el jueves el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.

Los funcionarios estadounidenses dijeron que los vuelos especiales, que también llevarán equipos donados por empresas y particulares, continuarán la próxima semana.

 

Más de 40 países comprometidos


 

Japón anunció el viernes que también contribuiría al esfuerzo internacional para ayudar a India y planea enviar 300 concentradores de oxígeno y 300 respiradores.

"Japón está junto a India, nuestro amigo y socio, en sus esfuerzos por combatir la pandemia de covid-19 mediante esta ayuda de emergencia adicional", dijo el ministerio de Relaciones Exteriores de Japón en un comunicado.

Más de 40 países se comprometieron a enviar ayuda médica, incluyendo oxígeno, dijo el jueves a la prensa el ministro de Relaciones Exteriores indio, Harsh Vardhan Shringla.

En total, las promesas de ayuda incluyen casi 550 instalaciones de producción de oxígeno, más de 4.000 concentradores de oxígeno, 10.000 botellas de oxígeno y 17 camiones cisterna criogénicos.

También se han enviado cientos de miles de dosis de vacunas, así como componentes esenciales para la producción de vacunas y medicamentos, añadió el ministro. "Se trata de una situación sin precedentes", dijo Shringla.

El viernes, el portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores Wang Wenbin indicó que "desde abril China exportó a India más de 26.000 respiradores y concentradores de oxígeno, más de 15.000 equipos de monitoreo médicos y cerca de 3.800 toneladas de material médico y medicamentos".

India registró unos 18,5 millones de casos de covid-19 desde el inicio de la pandemia, incluidos más de seis millones solo en abril.

Más de 200.000 personas murieron, pero muchos expertos creen que la cifra real es mucho mayor.

En muchas zonas fuera de Nueva Delhi y Maharashtra, muy afectadas por la epidemia, los hospitales se están quedando sin camas, sin oxígeno y sin medicamentos, lo que obliga a las familias de los enfermos a intentar conseguirlos por cualquier medio para salvar a sus allegados.

Muchos crematorios se enfrentan a la escasez de madera debido al extraordinario número de muertos, ya que cada pira requiere entre 300 y 400 kilos de madera.

 

Vacunaciones en suspenso


El gobierno indio abre el sábado la campaña de vacunación a todos los adultos mayores de 18 años, unos 600 millones de personas.

Pero varios estados han advertido que no tienen suficientes existencias y que el despliegue está amenazado por las disputas administrativas, la confusión sobre los precios y los problemas técnicos en la plataforma digital de vacunación del gobierno.

El centro financiero de Bombay, en el estado de Maharashtra, una de las ciudades más afectadas por la nueva ola de la epidemia, anunció que se veía obligada a suspender la campaña de vacunación desde el viernes hasta el domingo "debido a la falta de disponibilidad de existencias de vacunas".

Hasta ahora, el personal sanitario y los trabajadores de "primera línea", los adultos mayores de 45 años y las personas con comorbilidades pudieron beneficiarse de una de las dos vacunas de la campaña, la Covishield de AstraZeneca o la Covaxin de Bharat Biotech.

En total se administraron unos 150 millones de vacunas es decir solo al 11,5% de los 1.300 millones de habitantes de India y 25 millones de ellos recibieron dos inyecciones.